Un paseo por Toledo, una pareja genial, y un puñado de carretes.

El pasado fin de semana del 18 y 19 de octubre estuvimos Claudia y yo en la preciosa ciudad de Toledo. Habíamos quedado con Jessica para realizar un par de sesiones con ella (en la próxima entrada me extenderé más sobre este trabajo) y también con Juanjo y Lourdes, cuyo próximo enlace tendrá lugar el 11 de julio del año que viene. Como podéis comprobar, hacen una pareja perfecta, eso se nota en su forma de reír juntos, de bromear de forma cómplice, de besarse y de abrazarse. Es muy hermoso fotografiar estos momentos tan lindos de unos novios tan enamorados. La verdadera sesión preboda la haremos más adelante, pero aprovechando la ocasión de estar en la ciudad, tiré algunos carretes con ellos.

Y ahora, la parte técnica 😉

Me llevé la Rolleiflex 2.8F y la Mamiya 645 Super con el 80/1.9 de equipo de formato medio, y dos Nikon FM2N con un 24/2.8 y un 50/1.2 en cada una. De telemétricas llevaba una Olympus SP 35. Las fotos con Juanjo y Lourdes que os presento aquí fueron hechas con la Rolleiflex y la FM2N con el 50/1.2 AI. En la primera llevaba Kodak Portra 160 y en la segunda, Kodak Colorplus 200. Por la noche, decidí probar la Olympus SP 35 con un carrete de Ilford Delta 400 forzado a 1600 con luz natural por las calles de la ciudad. Intenté aprovechar los puntos de luz que me ofrecían los faroles y los luminosos de algunas tiendas, y todas las fotos fueron hechas con el objetivo abierto a tope (1.7) y unas velocidades de 1/15 y 1/30, por lo que parece que el pulso aguanta bien a estas velocidades tan bajas. Me ha enamorado por completo esta pequeña camarita con su 40 mm f1.7. Tiré al día siguiente algunas fotos de Jessica en el hotel y en exteriores con esta cámara y un Ilford HP5+ 400 y me he quedado de piedra cuando he visto los resultados. Nitidez, contraste, bokeh, separación del sujeto del fondo… Para mi, que acabo de aterrizar como quien dice al mundo telemétrico, pues he sido siempre de réflex, me ha convencido totalmente. La calidad es extraordinaria, es una cámara ligera y perfecta para llevar a todas partes, completamente mecánica (sólo necesita pila para el fotómetro) y de una construcción firme y robusta sin ser aparatosa. Muy muy recomendable, y además, muy asequible en el mercado de segunda mano en foros o ebay.

El revelado, como siempre, en casa con el Kit de Tetenal C-41 para color y Xtol 1+1 para el blanco y negro. Escaneado en un Epson V600.

Me encanta el grano natural de la película, sobre todo, en blanco y negro. 😉

Aquí os dejo las fotos, espero que os gusten!

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